Aprendí a perdonar al destino
por no darme lo que tanto ansío.
Aprendí a perdonar al tiempo que pasa a mi lado
y no me deja alcanzarlo.
Aprendí a comprender a todos y a cada uno de los que me rodean,
aunque ellos no me comprendieran.
Aprendí a entender que no todos somos iguales,
pensamos distinto y actuamos en consecuencia.
Aprendí a aceptarme a mi misma,
aunque no me guste mucho mirarme.
Aprendí muchas cosas…
Pero no he aprendido a perdonarme….
1 comentarios:
Ojalá aprendiera lo mismo, aunque me perdono siempre...
Cada vez escribes mejor, Luna.
Publicar un comentario